domingo, 9 de noviembre de 2008

Invitación


¿Se trata de un conjunto de entrevistas? ¿De un texto ensayístico?
¿De una compilación de memorias? ¿Habrá que responder
a la pregunta canónica por el género textual, cuando se ha escrito
y se está leyendo desde el género sexual? Dejo a cada lector
tomar su propia decisión… imaginando que tengo ante mí
una narrativa polifónica, un jardín en el sentido loynaziano,
donde el paisaje se crea al caminar los senderos.
La autora nos dice en un prólogo brevísimo casi confesional
en su tono, que “vivió la mitad de su vida en un mundo sin
muchas opciones y disfruta mucho comprobar que existen”.
Quizás estas palabras sean las más certeras no solo para definir
a la escritora y profesional de la psicología a quien le debemos
este libro; sino que, más allá de su perfil, nos brinda la postura
de toda una generación de cubanos, aquellos que abandonaron
la isla (¿o fue la isla quien los abandonó antes?) por
el puerto de Mariel en el año 1980… El placer de optar. ¿No
es acaso esto lo más parecido a la libertad? ¿No sería mejor
sustituir el sobrecargado lexema democracia por esta frase o
cualquiera de sus posibles paráfrasis?
Madeline Camara

2 comentarios:

GeNeRaCiOn AsErE dijo...

Felicidades! Allí estaremos Carmen.
Un abrazo, tony.

Anónimo dijo...

Alli estaremos con toda la tropa