lunes, 29 de noviembre de 2010

Lezama Lima el dia de Thanksgiven


Esto me lo regalaron por Thanksgiven, y aunque apenas tengo tiempo de escribir en el blog, me parece reflexión necesaria, para indagar por qué los cubanos somos tan desmemoriados:

(foto de Ivan Canas, tomada de internet)
«En nuestra expresión lo mismo se pierde el rasguño de los primeros años que lo más rotundo y visible de lo inmediato. Lo mismo perdemos un anillo hecho por Darío Romano, nuestro primer platero en el siglo XVI, que se inutiliza por la humedad un baúl lleno de la letra de José Martí en el anteayer que viene sobre nosotros como una avalancha […] Casi todo lo hemos perdido, los crucifijos tallados y el cuadro de la Santísima Trinidad, de Manuel del Socorro Rodríguez; las recetas médicas de Surí puestas en verso; las frutas pintadas por Rubalcava; las aporéticas joyas de Zequeira, pérdida en este caso más lamentable todavía puesto que nunca existieron; las pláticas sabatinas de Luz y Caballero; las cenizas de Heredia; la galería de retratos de capitanes generales, de Escobar; alguna mancha de Plácido en el taller de Escobar; las pulseras, he visto una de hilos de seda que era un primor, y las peinetas de carey, de Plácido; una receta de manjar cubano hecho por Manzano; no conocemos ni siquiera un sermón de Tristán de Jesús Medina, brillante y sombrío como un faisán de Indias; el recuerdo de alguna sobremesa de Martí niño con sus padres, donde tiene que estar el secreto de su cepa hispánica y de su brisa criolla, que une como una suprema sabiduría la madre y el caudal del río; sabemos que Julián del Casal hizo aprendizaje y algunos intentos de pintar, nadie ha visto una de sus telas de aficionado; en el museo no hay un solo cuadro de Juana Borrero, sus Negritos son para la única pintura genial del XIX nuestro. Todo lo hemos perdido, desconocemos qué es lo esencial cubano y vemos lo pasado como quien posee un diente, no de un monstruo o de un animal acariciado, sino de un fantasma para el que todavía no hemos invencionado la guadaña que le corte las piernas».

domingo, 10 de octubre de 2010

Maria Zambrano y el exilio

“…la patria es el mar que recoge el rio de la muchedumbre. Esa muchedumbre en la que uno va sin marcharse, sin perderse, el Pueblo, andando al mismo paso con los vivos, con los muertos. Y al salirse de ese mar, de ese rio, solo entre cielo y tierra, hay que recogerse a si mismo y cargar con el propio peso; hay que juntar toda la vida pasada que se vuelve presente y sostenerla en vilo para que no se arrastre. No hay que arrastrar el pasado, ni el ahora; el día que se acaba de pasar hay que llevarlo hacia arriba, juntarlo con todos los demás, sostenerlo. Hay que subir siempre. Eso es el desierto, una cuesta, aunque sea en el desierto. Esa cuesta que sube siempre y por ancho que sea el espacio a la vista , es siempre estrecha. Y hay que mirar, claro, a todas partes, atender a todo como centinela en el último confín de la tierra conocida. Pero hay que tener el corazón en lo alto, hay que izarlo para que no se hunda, para que no se nos vaya. Y para no ir uno, uno mismo, haciéndose pedazos. No hay que arrastrar el pasado, ni tampoco olvidarlo…”

miércoles, 29 de septiembre de 2010

Fidel Castro, Chocho en Jefe

Alexander Cockburn es un periodista y ensayista estadounidense-británico, que escribe en Counter-Punch, una publicación de la izquierda de EEUU.

Fidel Castro: el otoño del chocheo
Por Alexander Cockburn (*)

Algunos dirigentes políticos maduran en el ocaso: el octogenario Jimmy Carter es a menudo más sensato ahora de lo que lo fue hace cuarenta años.
Otros ahorran al mundo sus cábalas nocturnas, no siempre voluntariamente: Ronald Reagan sucumbió al Alzheimer; Ariel Sharon sigue con vida vegetativa, pero está muerto para el mundo. Desgraciadamente, Fidel Castro se rompió un brazo y una rótula cuando trastabilló en aquel malhadado escalón de cemento hace seis años. Ojalá que también se hubiera partido la lengua, ahorrándoles a sus antiguos admiradores, entre los que me cuento, el espectáculo de ver precipitarse en el disparatario a quien fue un gran revolucionario.
Si el presidente Raúl Castro quiere defender los méritos de Cuba en materia de derechos humanos, no tiene sino que recurrir al hecho de que su hermano no ha sido destituido de su cargo como Primer Secretario del Partido Comunista y arrojado en una celda aislada de la Casa de Dementes, el hospital psiquiátrico de La Habana. Lejos de eso, Fidel tiene acceso irrestricto a la radio estatal y al periódico oficial Granma.
Desde esos dos medios, Castro, con 84 años, ha venido soltando un chorro continuo de disparates.
Memorable entre sus incursiones en el delirio fue su brote de conspiracionismo en el sexto aniversario de los ataques al Trade Center neoyorquino y al Pentágono, sin que se le escatimara desde la televisión cubana la lectura entera de la descabellada pieza por parte de un locutor de plantilla.
Castro sostuvo que el Pentágono fue alcanzado por un misil, no por un avión, porque no se halló traza de los pasajeros. "Sólo un proyectil pudo haber creado el orificio circular ocasionado por el pretendido avión", según Fidel. "Fuimos engañados, igual que el resto de los habitantes del planeta". Un sinsentido, huelga decirlo. Se encontraron restos de los pasajeros del avión que impactó en el Pentágono: dientes y otras partes, con el ADN correspondiente. Centenares de personas vieron el avión, personas que conocían la diferencia entre un avión y un misil de crucero. La chatarra del avión se desescombró del lugar.
Es natural que dirigentes máximos como Castro sean conspiracionistas por disposición. Puesto que son obsesos del control, lo azariento y lo accidental les resulta ajeno a su marco de referencia. Si ocurrió, ocurrió por algo. Y si lo ocurrido fue malo, lo más probable es que se trate de una conspiración.
Más recientemente, a principios de agosto del presente año, Castro comunicó a su audiencia en Cuba y en el mundo entero su simpatía por uno necio tópico, cual es la creencia de que el mundo está dominado por el Club Bilderberg.
El octogenario expresidente cubano publicó un artículo el pasado 18 de agosto, difundido a través de tres de la ocho páginas del órgano del Partido Comunista, Granma, citando in extenso el libro del escritor de origen lituano Daniel Estulin, Los secretos del Club Bilderberg (2006), según el cual los Bilderbergs controlan todo, lo que significa que deben de tener un cargadísimo orden del día en la única actividad que desarrollan públicamente: una sesión de tres días una vez al año. Claro está que también se hablan mucho por Skype y se devanan los sesos conspirando y planeando maldades desde sus teléfonos móviles.
Los seguidores del programa radiofónico de Alex Jones, un santuario del conspiracionismo, recordarán sin duda la declaración de Estulin en 2007, según la cual habría "recibido información de fuentes internas a la comunidad estadounidense de inteligencia que sugieren que el gobierno norteamericano está estudiando un atentado para asesinar al congresista Ron Paul, porque se sienten amenazados por su creciente popularidad". Los fragmentos del libro de Estulin reverencialmente citados por Castro –que califica a Estulin como un hombre honrado y bien informado— reciclan algunas de las doctrinas de Lyndon LaRouche, uno de los conspiracionistas más alucinantes de la historia política. (Aún guardo en la memoria la afirmación de LaRouche, en un anuncio pagado en la cadena CBS en 1984, de que el ex vicepresidente Walter Mondale, que concurría contra Ronald Reagan para las presidenciales, era un "agente de influencia" de los servicios de inteligencia soviéticos. Era la época en que LaRouche estaba en estrecho contacto con la Casa Blanca de Reagan.)
A juzgar por las citas que ofrece de Estulin, Castro parece ganado por la idea, según la cual miembros de la marxista Escuela de Francfort como Thedor Adorno o Max Horkheimer, que llegaron a EEUU huyendo de los nazis antes de la II Guerra Mundial, habrían sido reclutados por los Rockefeller para popularizar la música rock a fin de "controlar a las masas" y apartarlas de la lucha por los derechos civiles y la justicia social [en los 60]. De acuerdo con Estulin, reverencialmente citado por Castro, "el hombre encargado de asegurar que a los norteamericanos les gustaran los Beatles fue el propio Walter Lippman".
De modo, pues, que Castro cree que los Beatles fueron inventados por los Rockefeller y que Walter Lippman, el famosos columnista que, ya talludito, escribió el borrador de los 14 Puntos del presidente Wilson en 1918, pudo llegar a coronar su carrera político-literaria 50 años más tarde, en 1968, enviando a los Beatles el texto lírico de Revolution, con su desmovilizador mensaje: "Dices querer una revolución / Bien, ya sabes / Todos queremos cambiar el mundo /… Pero cuando hablas de destrucción / Ya sabes que no puedes contar conmigo". (Yo creo recordar que Lennon escribió realmente la canción como respuesta a mis amigos Tariq Ali y Robin Blackburn, quienes en su calidad de miembros de la New Left Review y de la IV Internacional habían sugerido a Lennon que los Beatles arrimaran el hombro para financiar la causa revolucionaria.)
Y ahora el último brote de imbecilidad política de Castro ha sido conceder una entrevista a Jeffrey Goldberg, del Atlantic, permitiendo al hombre que el propio Castro describe como "un gran periodista" citar a Castro diciendo que el modelo económico cubano ha sido un desastre.
Goldberg es un periodista atroz, cuyo más notable logro ha sido colocar en el semanario The New Yorker una larga pieza en favor del ataque a Irak en 2003, uno de los ejercicios de desinformación más efectivos destinados a orientar al Congreso y a la opinión pública a favor de la guerra. La pieza se anunciaba como reveladora "de los posibles vínculos entre Saddam Hussein y al Qaeda".
Era el momento en que el FBI y la CIA acababan de destruir la afirmación del partido de la guerra, según la cual había habido un encuentro entre Mohammed Atta y un agente de la inteligencia iraquí en Praga antes de los ataques del 11 de septiembre de 2001. Goldberg vino a salvar los muebles de la pandilla de Bush. En el corazón de ese falsario artículo de 16.000 palabras se hallaba una entrevista en la ciudad iraquí de Sulaimaniya –controlada por los kurdos— con Mohammed Mansour Shahab, quien ofreció al ávido Goldberg todo lujo de detalles sobre sus actividades como enlace entre Osama bin Laden y los iraquís, pasando armas y otros materiales y equipos.
La pieza fue recibida con alborozo por la administración Bush, como una prueba del vínculo. El golpe de gracia a la credibilidad de Goldberg llegó el 9 de febrero de 2003, en el London Observer, y lo dio Jason Burke, el reportero en jefe de la publicación londinense. Burke visitó la misma prisión en Sulaimaniya, habló con Shabab y dejó establecido fuera de toda duda que la gran fuente de Goldberg es un mentiroso particularmente torpe, que ni siquiera conocía la apariencia física de Kandahar, con quien decía haber viajado para negociar con bin Laden. Fantaseó falsariamente con la esperanza de ver reducida su condena. Huelga decir que la demolición de Burke no fue noticia para la prensa estadounidense. Y se calla por sabido que el New Yorker jamás se disculpó por haber publicado el cuento de Goldberg, desde luego tan dañino como cualquiera de los artículos publicados por Judith Miller en el New York Times.
Puesto que Castro ha andado últimamente pregonando alarmas sobre un posible ataque a Irán, resulta estupefaciente verlo ahora elevar a Goldberg, un antiguo miembro de la Fuerza de Defensa de Israel, al panteón periodístico y esforzándose por pintar a su compañero de armas conspiracionistas en el 11-S, el presidente iraní Ahmadinejad, como a un antisemita.
Una parte de la izquierda ha querido ver en las displicentes observaciones de Castro sobre el modelo económico cubano una maniobra táctica para ayudar a su hermano a poner por obra las "reformas" que harán perder su puesto de trabajo a entre medio millón y un millón de cubanos. Yo lo veo como una loca falta de juicio de Castro, que primero dijo a Goldberg que "el modelo cubano no funciona ya más, ni siquiera para nosotros", para luego decir que había sido malinterpretado y que lo que quería decir era exactamente lo contrario. Obviamente, un sinsentido. Luego, Castro –entre varias otras cosas de mal gusto— llevó a Goldberg a una exhibición de delfines. Y yo me dije: encierren al viejo loco, liberen a los delfines y conviertan la exhibición en un parque temático de todos los intentos de la CIA para matar a Castro, incluidas trampas en un arrecife coralífero. Ironías de la historia: la CIA falló, y hete aquí que Castro se pone a la tarea, asesinando semana tras semana, metódicamente, su reputación

martes, 24 de agosto de 2010

Teatro del absurdo en Hamburg

El pie de grabado: "Princesa lesbiana pide libertad de cinco espias homosexuales en USA"

(original en "La loca del blog")

lunes, 2 de agosto de 2010

La vieja dama visita el Artime

La semana pasada tuvimos de visita al Grupo Buendía de Cuba, que dirige Flora Lauten. Nunca había visto a Buendía, pero los comentarios de otros que si lo habían hecho antes, permitían esperar una puesta excepcional. Ya se habían recibido noticias sobre la representación en Chicago. Por lo general, cuando subimos las expectativas tan alto, la realidad suele desmoronar los sueños. Y así fue.
Pudimos disfrutar allí de buenas interpretaciones de canciones populares muy familiares, quizás nostálgicas. Las múltiples alusiones a las necesidades materiales de la infinita, representadas por el pueblo de Gula fueron obvias. Y eso siempre se disfruta por aquí, con cierto morbo, por aquello de comprobar una vez más que no nos hemos equivocado. Me imagino, (quiero imaginar), que con toda intención la puesta reproducía una suerte de cabaret con plumas, lentejuelas, bailes exagerados, mañas de burlesque convencional, poco amañado. El desenfado isleño sobre las tablas, aquello de no tomar en serio ni nuestros peores vicios. El desenfado, tan saludable para bregar con la pena, a veces. El desenfado que nos permite cambiar de palo pa’ rumba y convertir el revés en victoria al ritmo de un son. Imagínenos a Hamlet, que ha colgado la carabela de un grueso cadenón dorado, viste su ropa de negro, holgada, los pantalones dos palmos bajo la cintura y declama su monólogo/raguetón: “Jama o no Jama, this is the question”. Algo así.
Parecería que la fina línea entre drama y comedia que caracteriza la obra de Dürrenmatt se había perdido. La sutileza del suizo, en “esfumato”, como la pintura de Leonardo. Sigo pensando que ese mensaje, (estético o moral) que apenas se adivina es el que llega lejos.

viernes, 23 de julio de 2010

En los altos de una gomera: Oda a la Tortura. Segunda (y última) Parte

Hablemos de la factura.
En más de una ocasión se ha visto que con pocos recursos se puede producir el objeto de arte; que muchos dineros se convoquen para un resultado carente de ángel. Algunos, exagerados, llegan a afirmar que las penurias materiales son condición sine qua non para exacerbar la creatividad. De nuevo, y en la misma línea de “La Oda...”, las generalizaciones resultan infelices, aun cuando las producciones de Teatro en Miami Estudio apuntan en esa dirección. Cuando Ernesto García afirma que la producción de su última puesta ha costado $75, olvida reclamar los llamados gastos “in-kind”. Entonces esta cifra se multiplicaría por 40 o 50, para retribuir merecidamente a los participantes. Y así vamos.
Costuras, las hay. Dos actores de grandes ligas se combinan con dos de menores y el resultado es bueno. Quizás el torturado debió alternar el lloriqueo perenne con silencios o texto, quizás el torturador de pueblo debió desarrollar otra gestualidad para indicar que le daba agua sucia al torturado, (lo del cepillito no convence). Sin embargo, ambos actores, Peraza y Casalla, demuestran dar pasos sólidos en el camino de la actuación. Enhorabuena. Los otros dos, Sandra García y Jorge Hernández, impecables. En particular me entusiasma que Sandra se aparte de algunos manierismos que venían repitiéndose en las últimas actuaciones y regale el depurado trabajo de que es capaz. Esta no es una obra de actores, es una obra de equipo y el equipo lo consigue. Música, luces y composición de escena se combinan armoniosamente, esta vez con la feliz contribución de Ludwig van Beethoven. Feliz contribución porque de lo contrario todo tendría la misma autoría y quizás la incorporación de otros creadores, (lo repito), enriquecería el trabajo de TEMS, donde no cabe duda que en los altos de una gomera, se hace buen teatro.

jueves, 22 de julio de 2010

En los altos de una gomera (primera parte)

Para los que amamos el teatro, la nueva propuesta de Ernesto García en la pequeña sala de TEMS, no puede menos que asombrarnos. Algunas ideas son difíciles de digerir. Por aquello de que la realidad no es blanca ni negra si no que adquiere todos los tonos de grises, que al común de los mortales le suele resultar más dificil de aceptar que la alternativa lapidaria y en ocasiones numantina. Si no estás conmigo, estás contra mí, justos y pecadores, patria o muerte, el cielo y el infierno, el odio y el amor, y cualquier otro extremo de simple colocación en el imaginario común.
Antes de asistir a la representación escuché comentarios respetables que, alarmados, encontraban la propuesta demasiado “relativista”, poco comprometida, (con qué o con quién); “pero si hasta quiere hacernos creer que el torturador es bueno!”
Mi lectura, (y qué bueno que hay muchas lecturas!), sin embargo, fue diferente. Con un excelente uso del llamado “multimedia”, con un profundo dominio de la composición escénica, el autor/director retoma el tenebroso y antiguo oficio de la tortura para invitarnos a repensar los múltiples ángulos desde los que podemos abordar la realidad. Un torturador de profesión recurre a discernimientos de dudosa moralidad, pero aún así, plausibles, para justificar o proveer de cierta racionalidad su oficio. Por otra parte, los “revolucionarios”, que quieren cambiar el mundo y con ello la injusticia social, acuden a las acciones terroristas, donde mueren inocentes. El torturador entiende su oficio digno y evita atascarse en la disonancia cognoscitiva que agrede a todos por igual. Entonces se salva, a sus ojos. Los “revolucionarios”, que históricamente han apelado a la política de fines, (whatever works), no importa por qué medios, buscan una sociedad mejor. No importa si vascos, irlandenses, montoneros o extremistas musulmanes; no importa contra qué poder, no importa contra qué abuso. Los múltiples Rashomons verán diferentes verdades, que quizás se compensen. Y a nadie le asiste la única verdad.
Me atrevería a asegurar que Ernesto García pertenece a una generación que aprendió duramente a rechazar los extremos, las buenas intenciones, las verdades lapidarias. Y lo expresa de esta manera. A mi se me ocurre un discurso mas civilizado que otros.

jueves, 15 de julio de 2010

domingo, 13 de junio de 2010

Carta de los 74

Con motivo de la discusión en el Congreso del proyecto de ley “Ley de reforma a las restricciones de los viajes y promoción del comercio”,”(H.R. 4645) un grupo de 74 activistas, miembros de la sociedad civil, blogueros, católicos y presos políticos, han redactado una carta desde Cuba, instando su aprobación.
La ley, levantaría las restricciones de viajes a Cuba para todos los estadounidenses y facilitaría la venta de productos agrícolas a la isla.
La carta, ha provocado las mas encontradas opiniones entre los cubanos de la isla y del exilio.
Los firmantes señalan que “el aislamiento del pueblo de Cuba beneficia a los intereses más inmovilistas del gobierno, mientras que la apertura sirve para informar y empoderar a los cubanos y ayudar a un mayor fortalecimiento de nuestra sociedad civil…Al paso del tiempo hemos comprobado que el régimen cubano no se abre plenamente ni al mundo ni a los propios cubanos porque a lo que más teme es a la apertura, a la libertad de comercio y a la libre empresa, al flujo de información y a la comunicación directa entre los pueblos”.
Si alguien tiene dudas acerca de estas afirmaciones, es que no tiene la más mínima idea de la historia de estos cincuenta años en la isla infinita. El gobierno cubano se ha valido del autobloqueo, sobre todo de ideas, de la desinformación o de la información parcializada que pregona las “maldades” del mundo occidental, los horrores del capitalismo, para formar un “hombre nuevo” que observa el mundo del otro lado con una mezcla de odio y amor. El sistema cerrado, empleado con mucho éxito por los antiguos países socialistas y la Unión Soviética, ha rendido su dividendo a los gobernantes cubanos, ávidos siempre de copiar las lecciones de supervivencia de sus mayores. Y a la censura oficial se incorporó la autocensura tejida finamente en la práctica de la gente.
Pero los tiempos han cambiado. Precisamente gracias a la tecnología, las noticias corren rápidamente y la impunidad del Poder se tambalea. En otros tiempos el mundo no hubiera conocido de la muerte de Orlando Zapata, ni de las vejaciones a Las Damas de Blanco. El mundo ha comenzado a cambiar de opinión sobre la llamada “revolución cubana”, gracias a que al fin comienza a conocer de sus horrores. El aislamiento sólo ha servido para mantener el Poder y para dejar desnudos a los que se le oponen. Es perfectamente conocido que cada gestión de apertura iniciada por el gobierno de Estados Unidos se ha visto frustrada por una medida draconiana, por llamarla de alguna manera, ejecutada por el Poder. A los esfuerzos del gobierno del presidente Carter, el gobierno cubano respondió con su famosa operación Caballo de Troya: Mariel; a las gestiones en época de Clinton, el derribo de las avionetas de Hermanos al Rescate. A veces me he preguntado si no haber apoyado la invasión de Bahía de Cochinos, no habrá costado la vida a Kennedy. La apertura es y ha sido sobretodo temida por el Poder, que no hace mucho ha llamado a la Internet, potro salvaje, al que hay que domesticar. La copia del acta de condena al preso de conciencia Ariel Sigler Amaya que circula por Internet en estos días, demuestra el miedo que el gobierno cubano siempre ha tenido a la libre información. Condenado a 20 años de prisión por tener una biblioteca independiente, y sus libros dispuestos para incineración. Libros quemados en la hoguera… parece un cuento medieval.
Al gobierno cubano habría que haberle declarado la paz hace mucho tiempo. Ahora estaríamos hablando de otra cosa.

sábado, 15 de mayo de 2010

Ivan Acosta y la hoguera


Esta semana, el periódico Granma publicó una denuncia furibunda contra los cineastas cubanos exilados. Cargada de epítetos e insultos contra el cineasta Ivan Acosta, se muestra amenazante contra todos. La nota termina insistiendo en que si algún compañero revolucionario se encuentra con una copia de la película "Rosa y el ajusticiador", debe lanzarla en la hoguera. ¡Excelente demostración de civilidad! Probablemente al que agarren con una copia podría enfrentar cargos muy severos, incluyendo por supuesto la tristemente célebre "propaganda con el enemigo". Y todo porque en el film alguien planea la muerte de "la lumbrera ideológica de nuestro heroico pueblo", según dice el artículo. En esta ciudad nos quejamos de Vigilia Mambisa, que puede hasta pasar una aplanadora en público sobre los CD's de un cantante que viaja a Cuba. Pero no hay duda que esta es una organización privada, que tiene en última instancia derecho a pensar como sus pobres entendederas se lo permitan. Pero el Granma es el órgano del Poder...¡Qué miedo!
Al autor de ese artículo, el señor Juan Arturo Pilar Moncada, si existe, lo invito a repasar lo que está escrito en el Memorial del PEN Club, en Australia: "The spirit dies in all of us who keep silent in the face of tyranny." Y qué decir de los que la aúpan y promueven...

jueves, 6 de mayo de 2010

La Patria Madre...


Y la madre el que le coja el ritmo, (al Poder de la infinita):



"(EFE), Desde el pasado domingo, Rosa Díez se ha reunido por separado con Oswaldo Payá, líder del Movimiento Cristiano Liberación y promotor del ``Proyecto Varela''; Elizardo Sánchez, portavoz de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional (CCDHRN) y la bloguera Yoani Sánchez.
También mantuvo encuentros con el líder cívico de Pinar del Río Dagoberto Valdés y con las Damas de Blanco.
La diputada española, que ha estado en Cuba acompañada del responsable de Relaciones Internacionales de UPyD, Fernando Maura, dijo no haber tenido problemas para celebrar esos encuentros, que no informó a las autoridades de la isla sobre los motivos de su visita y que voló a La Habana con un pasaje y visado tramitados en una agencia de viajes.
A primeros de año se produjo un incidente entre los gobiernos de Madrid y La Habana cuando las autoridades cubanas no permitieron entrar en la isla al eurodiputado socialista Luis Yáñez.
Antes hubo dos casos más en los que Cuba rechazó la entrada o estancia en la isla de parlamentarios españoles, el del diputado y responsable de Relaciones Internacionales del conservador Partido Popular, Jorge Moragas en octubre del 2004, y el de las ex senadoras de este mismo partido Isabel San Baldomero y Rosa López en mayo del 2005.
La visita de Rosa Díez a Cuba ha coincidido estos días con la de otro político español, el secretario general del Partido Comunista (PCE), José Luis Centella, que asistió a la celebración del Primero de Mayo."




¿Y por qué ahora puede campear por sus respetos la señora Diez?


Aqui hay gato encerrado...

domingo, 2 de mayo de 2010

¿Ernesto Cardenal para Premio Nobel?



Oración por Marilyn Monroe - de ERNESTO CARDENAL



Señor


recibe a esta muchacha conocida en toda la tierra con el nombre de Marilyn Monroe


aunque ése no era su verdadero nombre


(pero Tú conoces su verdadero nombre,


el de la huerfanita violada alos 9 años


y la empleadita de tienda que a los 16 se había querido matar)


y ahora se presenta ante Ti sin ningún maquillaje


sin su Agente de Prensa


sin fotógrafos y sin firmar autógrafos


sola como un astronauta frente a la noche espacial.


Ella soñó cuando niña que estaba desnuda en una iglesia


(según cuenta el Time)


ante una multitud postrada, con las cabezas en el suelo


y tenía que caminar en puntillas para no pisar las cabezas.


Tú conoces nuestros sueños mejor que los psiquiatras.


Iglesia, casa, cueva, son la seguridad del seno materno


pero también más que eso...
Las cabezas son los admiradores, es claro


(la masa de cabezas en la oscuridad bajo el chorro de luz)


Pero el templo no son los estudios de la 20 th Century-Fox.


El templo –de mármol y oro- es el templo de su cuerpo


en el que está el Hijo del Hombre con un látigo en la mano


expulsando a los mercaderes de la 20 th Century-Fox


que hicieron de Tu casa de oración una cueva de ladrones.


Señoren este mundo contaminado de pecados y radioactividad


Tú no culparás tan sólo a una empleadita de tienda.


Que como toda empleadita de tienda soñó ser estrella de cine.


Y su sueño fue realidad (pero como la realidad del tecnicolor).


Ella no hizo sino actuar según el script que le dimos-el de nuestras propias vidas-


Y era un script absurdo.


Perdónala Señor y perdónanos a nosotros


por nuestra 20 th Century
Por esta Colosal Super-Producción en que todos hemos trabajado.


Ella tenía hambre de amor y le ofrecimos tranquilizantes


para la tristeza de no ser santos


se le recomendó el Psicoanálisis.


Recuerda, Señor su creciente pavor a la cámara


y el odio al maquillaje –insistiendo en maquillarse en cada escena-


y cómo se fue haciendo mayor el horror


y mayor la impuntualidad a los estudios.


Como toda empleada de tiendasoñó ser estrella de cine.


Y su vida fue irreal como un sueño que un psiquiatra interpreta y archiva.


Sus romances fueron un beso con los ojos cerrados


que cuando se abren los ojosse descubre que fue bajo reflectores


¡y apagan los reflectores!


y desmontan las dos paredes del aposento (era un set cinematográfico)


mientras el Director se aleja con su libreta


porque la escena ya fue tomada.


O como un viaje en yate, un beso en Singapur, un baile en Ríola


recepción en la mansión del Duque y la Duquesa de Windsor


vistos en la salita del apartamento miserable.


La película terminó sin el beso final.


La hallaron muerta en su cama con la mano en el teléfono.


Y los detectives no supieron a quién iba a llamar.


Fue como alguien que ha marcado el número de la única voz amiga


y oye tan sólo la voz de un disco que le dice: WRONG NUMBER.


O como alguien que herido por los gangsters
alarga la mano a un teléfono desconectado.


Señor


quienquiera que haya sido el que ella iba a llamar


y no llamó (y tal vez no era nadie


o era Alguien cuyo número no está en el Directorio de Los Angeles


¡contesta Tú el teléfono!

teatroenmiami.com: TADEUSZ KANTOR


Crema para los amantes del teatro. Visite teatroenmiami.com. Un corto sobre la famosa puesta de "La clase muerta", de Tadeusz Kantor, el director polaco. El propio director está en escena y es el maestro en una clase con personajes muertos, que cargan sus vidas, o sus otros yo, a travès de muñecos. En Cracovia, ciudad de artes. Los muertos/alumnos desfilan en una parada infinita. Quizas lo que quede después de la muerte. Gracias, Ernesto.
(la foto es de Kantor dirigiendo un happening. ¡Qué loco!

miércoles, 28 de abril de 2010

Talco por Yoani Sanchez




Con un pulóver ceñido y el pelo embadurnado de gel, ofrece su cuerpo por sólo veinte pesos convertibles una noche. Él muestra ese rostro de pómulos salientes y ojos achinados que son tan comunes entre quienes vienen del oriente del país. Mueve todo el tiempo los brazos, con una mezcla de lascivia e inocencia que produce por momentos lástima, por otros, deseo. Forma parte del vasto grupo de cubanos que se gana la vida con el sudor de su pelvis, que mercadea su sexo ante extranjeros y nacionales. Una industria del amor rápido, de las caricias breves, que en esta Isla ha crecido considerablemente en los últimos veinte años.
La Habana tiene por momentos aires de burdel, sobre todo si se transita por la calle Monte hasta la intersección de ésta con Cienfuegos. Mujeres jóvenes con ropas vistosas, pero algo desteñidas, ofrecen su “mercancía”, especialmente cuando cae la noche y los elásticos no se ven flojos ni las ojeras tan grises. Son las que no pueden competir para alcanzar un gerente o un turista que las lleve a un hotel y les ofrezca -al otro día- un desayuno con leche incluida. No usan perfumes de marca y completan su trabajo en unos apretados cuartos de solar o en el descanso de una escalera. Trafican con gemidos, intercambian espasmos por dinero.
Estos hombres y mujeres –comerciantes del deseo- evitan tropezarse con los uniformados que vigilan la zona. Caer en manos de uno de ellos puede significar una noche en el calabozo o la deportación a su provincia de origen para quienes están ilegales en la ciudad. Todo puede resolverse si el policía capta la propuesta de un muslo que se le insinúa y acepta intercambiar el acta de advertencia por unos breves minutos de intimidad. Algunos agentes del orden volverán asiduamente a cobrar su peaje –en moneda o en servicios- para permitirles a estos seres nocturnos que sigan apostados en las esquinas. Negarse a dárselo puede hacer a las mujeres terminar en una granja de reeducación de prostitutas y a los hombres ser acusados de un delito de peligrosidad predelictiva.
Así se completa el ciclo del sexo por dinero, en una ciudad donde el trabajo honrado es una reliquia de museo y las necesidades llevan a muchos a apostar el cuerpo, a contonearse a la espera de una oferta.

jueves, 22 de abril de 2010

¿HASTA CUANDO, CHAN LI PO?




Cuando leía mi propio post, recordé a Chan Li Po . Me imagino que conocí al actor Aníbal de Mar en su otra caracterización, en Pototo y Filomeno. Por la edad y todo eso. Pero me gusta Chan Li Po. Escuché muchas veces su frase sobre la paciencia, porque había pasado a formar parte de la jerga popular. Aníbal de Mar hizo la caracterización de un detective chino. Un poco hardboiled detective, del film noir y un poco trasladando el personaje de otro detective chino, Charlie Chan, creado por The Saturday Evening Post, (Earl Derr Biggers), en los 20’s y los 30’s; y un poco por la creación de Feliz B. Caignet, el precursor cubano de las radionovelas, y las telenovelas, y todas esas historias por entregas del siglo XX y lo que va del XXI. A diferencia de su homólogo americano, Cha Li Po era serio, caballero, juicioso, un gentleman. Las aventuras de Chan Li Po comenzaron a radiarse a través de una emisora santiaguera, pero llegaron rápidamente a los aires nacionales. A las 8 de la noche, todos los que tenían radiotransmisor y sus vecinos, escuchaban las aventuras del detective chino. Pero sucedió que por entonces, el cine hacia de las suyas. Por fin, y temprano si comparáramos con otros países, el cine sonoro comienza a producirse en Cuba. Y el primer largometraje es precisamente basado en un episodio de Chan Li Po: La serpiente roja. Se cuenta que el 19 de julio de 1937 se estrenó en labana la primera cinta sonora, dirigida por Ernesto Caparrós, fallecido en el exilio, y protagonizada por Pituka de Foronda, actriz canaria, a quien se puede ver en muchos viejos filmes mejicanos, y por Anibal de Mar, nuestro Chan Li Po. La primera película sonora cubana se desarrollaba en una mansión inglesa, por ese complejo del indiano, que no dejamos todavía: las cosas buenas, las importantes, suceden en el viejo mundo. Todavía a la sazón, los intelectuales se sienten “realmente reconocidos”, si conquistan esos predios. A nadie le interesaría ser reconocido en Jatibonico o Taguasco. Verdaderamente eso no sería muy edificante en términos económicos. Quizás sería hermoso. En la cinta podemos ver a un “Filomeno”, joven, delgado, achinado como un chino, que dice, una vez más: “Pachiencha, tenga’ mucha pachienchia”. La película fue más bien mediocre, pero en cambio recaudó con creces lo que había gastado en producción. Digamos que fue un éxito económico, lo que nunca ha tenido que ver con el valor artístico, hasta nuestros días, pero la frase de Chan Li Po, ha pasado a formar parte del imaginario nacional. Sobre todo en los últimos cincuenta años, donde el Poder ha pedido a la gente común, que tengan “Mas pachienchia”, en múltiples ocasiones. ¿Hasta cuándo?

lunes, 19 de abril de 2010

La lógica de Raúl



Suceden los acontecimientos relacionados con la Infinita a un ritmo tan veloz que se le hace a los que tenemos otros mundos donde deambular la cotidianidad un tanto cuesta arriba seguirlos, rumiarlos y producir racionalidad. Por primera vez, envidio a los poetas. Ellos sienten y producen la palabra. Y quizás, la madre el que los entienda, pero el efecto catártico cumplió su función y renovados, o en escombros, deambulan su cotidianidad por otras cuerdas. A mí, me traga la razón. Sigo atisbando un eje cartesiano en cada rincón de mi casa, buscando causalidades o simplemente correlaciones, en su sentido estadístico, para explicarme el mundo. Avatares de Sísifo, de “tremendacomemierda” , se diría en cubano.
Quizás sea cierto lo que ha dicho Raúl Castro y aunque muchos "se desesperan, deseando cambios inmediatos'', es necesario "evitar'' el "apresuramiento o improvisación''. Pero, cuánto más ha de esperar una nación donde nada es lo que parece? Dicen lo mismo, los cubanos de adentro y los de afuera, pero éstos últimos responden a los intereses imperialistas y los primeros, no deben desesperarse. Esperen, esperen serenamente, parece decir Raúl, que por la vía de la corrupción administrativa centralizada, la ineficiencia económica, la piel de camaleón pegada a la epidermis de cada hijo de vecino, la represión blanca y no tan blanca, y la falta de esperanza construiremos un futuro mejor. Al menos ese futuro inmediato que nos queda a los que aún, sin duda, tenemos el Poder en esta tierra. Seguiremos insistiendo en las desgracias que pasan en otros mundos. Así se disuelven las que pasan en el nuestro. Los “cambios” que piden la mayoría de los cubanos no pueden ser producto de la improvisación. No vamos a permitir otro “desmerengamiento” como el que sucedió en el campo socialista. Primero se hunde la isla con todos ustedes dentro.

sábado, 17 de abril de 2010

Hoy, Las Damas de Blanco, a una cuadra del Parque Trillo

"La DSE trata de impedir asistencia a Te Literario

Hay cientos de personas dirigidos por oficiales del Departamento de la Seguridad del Estado (DSE) en las esquinas de Neptuno con Hospital y con Aramburu.

Estas son las palabras de Laura Pollán:-En las dos esquinas hay cientos de personas. Yo vivo en Neptuno entre Hospital y Aramburu.

-Por la calle hospital, hasta Zanja (unas 5 cuadra hacia el sur), en todas las esquinas hay grupos de personas y de la Seguridad del Estado pidiendo Carnet de identidad para impedir que lleguen las Damas de Apoyo. Tampoco han podido llegar periodistas.

-Por Hospital hasta San Lázaro (unas 4 cuadras hacia el norte) tienen puestos de mando, y aquí al doblar en una escuela.

-En Neptuno y Soledad, tienen atravesado un auto con policías y motos Suzuki de la Seguridad del Estado; han cerrado Neptuno.

-Ni que fuéramos las terroristas más grande, y lo que vamos a hacer es el Té Literario…"

El Parque Trillo, el de verdad, en La Habana, está caliente.

Mensaje recibido a través de PayoLibre.

Los Aldeanos: Los jóvenes piden cambios

http://www.youtube.com/watch#!v=hV06kbKGBBs

lunes, 12 de abril de 2010

TALCO


No se dejen engañar. “Talco” no es un drama de tocador, sino otra creación acerada de un autor que pretende describir al “hombre nuevo”. Ese eufemismo. Si su lectura puede producir reacciones somáticas en el más sereno de los mortales, su tangibilidad corpórea en las tablas puede acarrear, más allá de un estremecimiento profundo, el repudio orgánico al orden social que lo ha engendrado. Se unen de nuevo, la pluma de Abel González Melo con la constante experimentación escénica de Alberto Sarraín, para lanzar un cubo de mierda a los que aún defienden lo indefendible. Otra lectura sería mantener el juego de ambigüedades intelectuales de los que, aferrados a la cerca, no quieren desatar las iras del Poder. Los que insisten en llamar al vino, pan, y a éste, vino. Metáfora gastronómica, que roza con la política, pero no se enfanga en sus lodos. De forma que los artistas siguen siendo artistas, aunque se permitan ciertas licencias que parecen socavar el Orden, pero que en última instancia van a incidir en una élite, conocida por su inmovilismo por estas tierras. Al gran público, alimentémoslo con telenovelas de lejana realidad y muchas consignas. Al fin y al cabo, todos repetirán a coro: “La calle es de Fidel!”
“Talco” pertenece a una trilogía, que su autor ha llamado “Furias de invierno”. “Chamaco” y “Nevada”” le preceden. De esta forma el autor va desprendiéndose de su propia primavera existencial y penetra en un “verano” de madurez creadora. En las tres piezas, rebusca en los fondos bajos del mundo moral. Utiliza el recurso de envolver a los personajes, a través de la casualidad, el “destino”, la “voluntad de los dioses” (¿griegos?), en torno a un objeto común del deseo. La situación se desarrolla en la nocturnidad, (Fiilm Noir), junto a la decadencia física de una hermosa ciudad por la que han pasado un tsunami, un huracán, una guerra y un terremoto de destrucción ideológica. Cuando no queda nada, queda el deseo. Y así arma una trama donde el corrupto puede ser un policía, un administrador, una empleada, un médico, un juez, o todos a la vez, y donde explota, se hace añicos, aquella, (ahora anacrónica), forma primaria de organización social que llamamos familia. Pero el discurso dramatúrgico no es ostensible. El Pathos se enreda en el rechazo y el asco antes de encontrar su camino. Comprobé con estupor durante las representaciones de “Chamaco” en el teatro Trail, como muchos espectadores se perdían en este laberinto. Con tal que la semilla límbica “prenda”, germine, algún tiempo después, estamos salvados.
Llama la atención que en todas las reseñas de estas tres obras, producidas a raíz de su puesta en escena, versión cinematográfica o premiación, aparece una constante determinación a explicar que “esta historia puede suceder en cualquier parte”, “tan universal que se representó en Turquía”, “decadencia social del siglo XXI”, etc., que intenta disolver el significado local a través de significantes universales. Los críticos cubanos han tratado de esta manera de “pasar gato por liebre”, sin hacer referencia a los conflictos existenciales que atraviesan estos individuos en virtud de haber participado en un proyecto social que ha impuesto penurias y sacrificios a una nación durante medio siglo y cuyos resultados se observan en “Máshenka, Ladura”, “Javi, El Ruso”, “Zuleidy, La Guanti” y “Álvaro, El Cherna”, los personajes de Talco. De esta manera tratan de soslayar las iras del Poder y permitir la difusión de una obra por demás contestataria. Pero, ¿hasta cuándo se va a jugar con la cadena sin mencionar al Mono?
Recomiendo asistir a esta puesta en escena de Alberto Sarraín, en el Teatro Abanico. Un trabajo exquisito de dirección de actores, escenografía del maestro Eduardo Arrocha, y el texto arrollador de González Melo. Ya sé que es muy fuerte. También lo son los mítines de repudio y los muertos en las cárceles o en las barrigas de los tiburones del Estrecho.
Por cierto que las fotos de Julio de la Nuez son excelentes.
Sólo para adultos adultos.

sábado, 10 de abril de 2010

Los viejos sabios

Me ha costado tanto trabajo empezar a escribir. Pero voy a hacerlo. Me he limitado a “postear” elemento esenciales de lo que pasa con respecto a Cuba, porque no he tenido energía para hacer otra cosa. Claro que ahora no tengo lectores. Pero escribiré y ya veremos. Los lectores que quieren saber lo que pasa en Cuba tienen que buscar la información en Penúltimos, Ichikawa , Yoani Sanchez y hasta Tumiami, que además de arte, cultura y nuestra realidad en USA, se hace eco también de los desmadres de la isla. Se cartean Silvio Rodríguez y Montaner. Este último ha hecho gala de una retórica civilista, respetuosa, que intenta tender puentes y demuestra nivel de información y madurez. Silvio, se contradice en ocasiones, se torna ofensivo en otras y termina con una apología a la sabiduría de los que peinan canas, sabios de culturas milenarias, que le han permitido acumular una pequeña fortuna y un enorme reconocimiento internacional. Aquí la palabra clave es “permitido”, porque no sabemos cuántos otros con igual o más talento, han terminado aplastados socialmente, o siendo pasto de tiburones en el Estrecho de la Florida, o intentando edificar su vida en un país extraño. Qué se puede decir de un orden donde los jóvenes quieren sobre todo, vivir en otra parte? Donde los hijos o los nietos de los ancianos sabios administran negocios en cualquier lugar del mundo. Tienen galerías de arte, condominiums lujosos, acceso a la Internet, a las modas de los ricos y famosos. Y los hijos de los que aplauden fervorosamente a los ancianos y han acumulado un pequeñísimo poder, también viven en otras tierras, y sólo conocen de la vida miserable de la isla en sus visitas de verano o Navidad a los padres que también viajan pero aun “residen” en la tierra de los viejos sabios. Este grupo de artistas, intelectuales, militares, funcionarios, que aplauden como focas al desgobierno impedirán el cambio necesario en esa sociedad. Tienen demasiado que perder. Y no van a dejarse quitar lo que con tanta mezquindad ha obtenido. Casas, autos, criados, publicaciones, premios, tratamiento deferente, comida! Viajes! … Y por todas partes, la baba antiimperialista, que cae tan bien y nos hace parecer tan “avant gard”, mientras tomamos un buen Rioja, descubrimos los mercadillos de Marruecos o asistimos a una Bienal en Italia. Estos grupos alrededor del verdadero Poder, no van a permitir un cambio en Cuba. Mientras tanto, coqueteamos con el exilio, que padece de esa crónica nostalgia, que los hace tan manipulables y condescendientes con nuestra “tozudez ideológica”. Vivan los viejos sabios que han sabido mantener el Poder por más de cincuenta años! A ellos pertenece completamente el futuro!

Ejemplo: http://www.youtube.com/watch?v=MbzciUAiOxQ

miércoles, 7 de abril de 2010

jueves, 25 de marzo de 2010

Sueño de una tarde de primavera


Sueño que un día, uno de estos días, alguien decida seguir a las Damas de Blanco. Y otro siga sus pasos, y luego otro y otro. Que un día todos se unan marchando tras ellas, en silencio y sin miedo.

domingo, 21 de marzo de 2010

ESCRIBIR CON LA DERECHA

Había una canción de Violeta Parra, la folklorista chilena, en los tempranos 70’s que decía algo así como que “en el correo temprano” había encontrado una carta. En esta carta se decía que a su hermano lo habían encarcelado. “Por escribir con la izquierda le hallaron la letra mala”, rimaba la cancion. Para los que arribábamos a los veinte años en circunstancia de un socialismo insular, aquellos acordes denunciaban el mundo sórdido que se vivía más allá del mar. Hoy se me ocurre que para el Poder del “socialismoinsular”, los derechos humanos son HUMANOS QUE ESCRIBEN CON LA DERECHA, contra los que no tienen nada en contra. Zurdos o diestros, se buscan problemas, si dejan de aplaudir. Se convierten en sicarios imperialistas, que hay que aplastar. “Negrademierda”, te has convertido en un agente imperialista! Te vas a arrepentir! Te vas a reunir con tu hijo muy pronto!, gritan los otros agentes de un orden que nadie cree, pero que todos temen. En Cuba.

Para escuchar la cancion de Violeta Parra: http://www.youtube.com/watch?v=NUAfWKLX438

Leonardo Padura y los bolos

La Habana y Moscú, ¿amigos para siempre?
Miercoles, 17 March 2010 11:35 Leonardo Padura

Por Leonardo Padura
LA HABANA, (IPS) Con un libro en la mano, los rusos han regresado a Cuba.
Durante treinta años ellos fueron una presencia indispensable en la isla: los entonces llamados soviéticos le daban a Cuba socialista el soporte político internacional, militar y económico en un mundo álgido que estaba claramente dividido en bloques y temblaba con los vientos gélidos de la Guerra Fría y las amenazas de conflagraciones atómicas.
Los cubanos nos alumbrábamos y veíamos televisión (tantas películas y hasta dibujos animados “rusos”) gracias al petróleo soviético, leíamos libros y periódicos impresos con el papel que ellos nos enviaban, sosteníamos nuestras defensas militares con las armas y pertrechos llegados desde “el país de los Soviets”, horneábamos nuestro pan con trigo soviético y comíamos latas de “carne rusa”. Varias decenas de miles de cubanos estudiaron por esas tres décadas en Moscú, Leningrado, Kazán y otras ciudades del gigantesco país, y miles de ellos regresaron casados con una rusa –que no siempre era propiamente rusa-. En las calles cubanas era normal encontrarse con alguno de los asesores de las más diversas especialidades (pues no solo eran militares) enviados a enseñar a sus colegas caribeños. Se hablaba de la indestructible amistad, de la entrañable hermandad entre los pueblos y gobiernos de Cuba y la URSS. Políticamente los dos países formaban una yunta en el camino hacia un mundo mejor… Pero los cubanos siempre les llamamos “bolos”, marcando una insuperable distancia cultural y con la arrogancia (muchas veces infundada) que nos caracteriza y hasta nos define.
Cuando en 1991 colapsó la Unión Soviética y con ella la amistad indestructible, también se esfumó el petróleo, el papel y el trigo que de allá nos llegaba. Los países nacidos de la desmembrada unión optaron unánimemente por un retorno al capitalismo, y capitalistamente exigieron dinero a cambio de productos, y Cuba debió sostener su socialismo en la más desoladora soledad. Se vivieron entonces los años de la terrible crisis cuyo nombre oficial e histórico (“Período Especial en Tiempos de Paz”) no puede expresar los niveles de carencia y desesperación a los que nos vimos abocados los cubanos de a pie (o de “a bicicleta”, el medio de transporte que sustituyó a los ómnibus y autos secos de combustible exsoviético).
Una reacción inmediata a la nueva coyuntura rebotó con fuerza: apenas se acabó el país que enviaba recursos y técnicos, y casi de un golpe se difuminó su antes agobiante y abarcadora presencia en la vida, cultura y cotidianidad cubana. Por desaparecer, desaparecieron hasta las “bolas” casadas con los cubanos, y solo unas pocas de ellas permanecieron en la isla, resistiendo escaceses y apagones. Los treinta años de matrimonio político, social, cultural no dejaban descendencia visible: ni una costumbre, ni un plato típico (ni siquiera una base militar, pues también estas desaparecieron), y la huella rusa en Cuba se fue borrando con unas pocas brisas y en muy poco tiempo se comprobó que de aquella complicidad no quedaba prácticamente nada --fuera de ciertos esquemas partidarios e ideológicos y de algunas prácticas políticas que los mismos rusos rechazaban en sus tierras y los dirigentes cubanos decidieron conservar.
En los últimos años, impulsados por la figura del antes presidente y ahora primer ministro Vladimir Putin (empeñado en el rescate del orgullo y la grandeza rusas, de un lugar decisivo en el mapa político mundial), Moscú inició un nuevo acercamiento a su antiguo aliado. Cuba, en medio de un recrudecido embargo norteamericano, necesitaba de todos los apoyos políticos y de todas las cercanías económicas y comerciales, y aceptó gustosa el gesto. El filtreo se reinició, aunque en muy diferentes condiciones: ya no se trataba de geopolítica socialista, sino de conveniencias tácticas, comerciales, políticas entre dos países con sistemas económicos e ideológicos diferentes, diríase que antagónicos. El nuevo contacto ha tenido, por supuesto, varias ventajas sicológicas e históricas: la nostalgia por los viejos tiempos de hermandad o el hecho de que en la isla apenas ha circulado la literatura de análisis histórico de lo que realmente ocurrió en “el país de los soviets” a lo largo de sus setenta años de socialismo, esencial y dramáticamente marcados por los métodos políticos de Stalin: ni historias de gulags, ni de desplazamientos étnicos o limpiezas políticas, ni del terror como política de Estado, ni de desastres ecológicos como precio de un desarrollo a toda costa. Menos aun de las turbias aventuras extraterritoriales (Polonia, España, países bálticos y del Cáucaso) programadas por el secretario general georgiano y sostenidas por sus herederos.
Ahora, con un libro en la mano, los rusos vuelven a la isla. La Feria del Libro de Cuba ha tenido este año como país invitado de honor a la Federación Rusa, y el evento cultural se ha convertido en una plataforma para el desembarco masivo de figuras de la política y el arte ruso contemporáneo. Libros (en ruso), películas (rusas y soviéticas), compañías de danza han estado a la cabeza de esta búsqueda de una recuperación de cercanías quebradas durante casi dos décadas en las que se cruzaron no pocos insultos y acusaciones de deslealtades. Ya antes, como avanzadilla, habían llegado los líderes de la iglesia ortodoxa, que incluso abrieron su templo (¿cuántos ortodoxos rusos hay en Cuba?) en un sitio privilegiado de La Habana colonial.
Aunque en la prensa cubana a veces hasta se filtran comentarios sobre, por ejemplo, los devastadores efectos del realismo socialista en el arte ruso, resulta evidente que la imagen que se ha ido ofreciendo de Rusia y su presente guarda poca relación con la que se promovió en los inicios de la década de 1990, cuando se dio el salto en el vacío y la cuna de la revolución proletaria, renunciando a los principios alabados por 70 años, se abrió de piernas y alma al más feroz capitalismo (el desmerengamiento se le llamó).
El país estable, próspero y respetuoso de las diferencias que se nos presenta hoy, es, sin embargo, un país capitalista y, por lógica dialéctica y económica, debe arrastrar todas las características del sistema (estudiado y condenado por Marx), ésas que llevaron a los bolcheviques a hacer la revolución. Quizás la más inesperada lección de estos acontecimientos y percepciones es que estemos aprendiendo, ahora, que hay capitalismos malos y menos malos (casi hasta buenos) y que el pasado es un libro del que se pueden entresacar capítulos favorables y desdeñar los más conflictivos, por el bien de la política. Siempre la política.
Leonardo Padura, escritor y periodista cubano. Sus novelas han sido traducidas a más de quince idiomas y su más reciente obra, El hombre que amaba a los perros, tiene como personajes centrales a León Trotski y su asesino, Ramón Mercader.

martes, 16 de marzo de 2010

La Memoria Histórica

Tendrán Alzheimer los cubanos?

Fidel Castro condena los gobiernos que dejan morir a aquellos en huelga de hambre por sus ideas

“LA TOZUDEZ, LA INTRANSIGENCIA, LA CRUELDAD, LA INSENSIBILIDAD ANTE LA COMUNIDAD INTERNACIONAL DEL GOBIERNO BRITÁNICO FRENTE AL PROBLEMA DE LOS PATRIOTAS IRLANDESES EN HUELGA DE HAMBRE HASTA LA MUERTE, RECUERDA A TORQUEMADA Y LA BARBARIE DE LA INQUISICIÓN EN PLENA EDAD MEDIA ¡TIEMBLEN LOS TIRANOS ANTE HOMBRES QUE SON CAPACES DE MORIR POR SUS IDEAS, TRAS 60 DÍAS DE HUELGA DE HAMBRE! AL LADO DE ESTE EJEMPLO ¿QUÉ FUERON LOS TRES DÍAS DE CRISTO EN EL CALVARIO, SÍMBOLO DURANTE SIGLOS DEL SACRIFICIO HUMANO? ¡ES HORA DE PONER FIN, MEDIANTE LA DENUNCIA Y LA PRESIÓN DE LA COMUNIDAD MUNDIAL, A ESA REPUGNANTE ATROCIDAD!FIDEL CASTRO 18-08-198168 CONFERENCIA DE LA UNION INTERPARLAMENTARIAA TODOS LOS HOMBRES Y MUJERES QUE LUCHARON POR LA INDEPENDENCIA DE IRLANDA”--



FIDEL CASTRO 18-08-1981 68 CONFERENCIA DE LA UNION INTERPARLAMENTARIA A TODOS LOS HOMBRES Y MUJERES QUE LUCHARON POR LA INDEPENDENCIA DE IRLANDA”--